Este jueves 26 de septiembre, Tomás Vodanovic presentará su renuncia a la alcaldía de Maipú para iniciar su camino a la reelección. Sin embargo, su salida deja una comuna marcada por deficiencias en los servicios y una infraestructura pública en deterioro.

¿Es esto lo que los maipucinos quieren seguir soportando?

Durante su administración, los servicios comunales han funcionado a medias. Los ciudadanos han vivido entre calles en mal estado, llenas de baches y filtraciones de agua que nunca fueron reparadas de manera efectiva.

¿Es aceptable que una de las comunas más importantes del país viva esta realidad?

La pregunta que muchos se hacen es si Maipú realmente necesita un alcalde que, además de no vivir en la comuna, ha demostrado poco interés en solucionar los problemas que afectan a diario a sus habitantes.

¿Debería alguien que no siente las dificultades de la comuna en carne propia seguir liderando su destino?

Si Vodanovic sale reelecto, la preocupación no solo recae en su capacidad de gestión, sino en el aumento de operadores políticos del Frente Amplio. La municipalidad, ya sobrecargada de intereses externos, ¿podrá soportar otro periodo de influencia política, donde los recursos no se destinan a los maipucinos, sino a asegurar puestos para amigos y aliados?

Maipú necesita una administración comprometida, cercana a sus problemas reales, y capaz de devolverle la dignidad a una comuna que ha sido testigo del abandono.